En los años sesenta y setenta, Montenegro era conocido como el Saint-Tropez del Adriático, al atraer a personalidades de la talla de Richard Burton, Elizabeth Taylor, Sophia Loren o la princesa Margarita de Inglaterra. Afortunadamente, ha logrado recuperar el tirón turístico de antaño, gracias al auge de Sveti Stefan, un encantador pueblo de pescadores con viviendas de tejados rojos y situado en un istmo al sur de Budva. Precisamente, es en esta localidad donde abre las puertas uno de los hoteles de 4 estrellas en Montenegro de Iberostar.
Esta localidad de casi 20.000 habitantes destaca por su innegable magnetismo. Uno de sus principales reclamos es la ciudad vieja, de estilo predominantemente veneciano y cuidadosamente restaurada tras el terremoto de 1979. Existen no pocas versiones y leyendas acerca de su origen. Algunos estudiosos e historiadores creen que la zona fue una isla que, posteriormente, quedó unida a la costa mediante una lengua de arena. Entre los rincones que no hay que dejar de descubrir en Budva, se cuentan tres iglesias: la iglesia de San Iván, construida en el siglo VII; la iglesia de Santa María de Punta, del año 840, y la iglesia de la Santísima Trinidad, concluida en 1804.
Otro lugar que conviene visitar en Montenegro es Kotor, una pequeña ciudad costera enmarcada en la bahía de Kotor (o Bocas de Kotor), uno de los puntos más accidentados del Adriático. Esta atractiva población aún conserva una imponente muralla construida durante la dominación veneciana, y se halla a escasa distancia del fiordo más meridional de Europa (a pesar de que en realidad es una ría). Rodeada de poderosos acantilados de piedra caliza, este enclave brinda una estampa única. Por su gran belleza paisajística y su valor histórico, esta parte del litoral montenegrino, de 22.000 habitantes, fue incluida en la lista Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO en 1979.
Dentro de la bahía de Kotor, también vale la pena acercarse a Herceg Novi, una localidad de 20.000 habitantes que se ha consolidado como el principal centro vacacional de Montenegro, y en la que se halla uno de los mejores hoteles en Montenegro. Con un nombre que significa ‘castillo nuevo’ y fundada en 1382 por el rey bosnio Tvtrko I, posee un casco antiguo amurallado que le confiere un aspecto imponente.
La tríada de ciudades indispensables sitas en la bahía de Kotor se cierra con la cautivadora Perast. Ubicada a pocos kilómetros al noroeste de Kotor, se caracteriza por su proximidad a los islotes de San Jorge y Nuestra Señora de las Rocas, dos de sus principales enseñas, así como por la presencia de hermosos edificios barrocos.
Asimismo, conviene tener en cuenta que cualquiera de estas localidades es ideal para realizar una excursión a la seductora Dubrovnik, en Croacia, considerada como el principal destino turístico del Adriático. Circundada de murallas y con un casco antiguo que fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1979 y 1994, esta urbe fue una importante potencia marinera en el siglo XIII, y ha sabido mantener intacta su atmósfera incomparable.
Ya en el interior, encontramos Podgorica, la capital de Montenegro y la ciudad más poblada del país. En su término municipal, todavía se pueden admirar algunos restos de siglos de ocupación turca, como la torre del reloj.
Por último, y por lo que atañe a los paisajes naturales de Montengro, cabe referirse al Parque Nacional de Durmitor (390 km²) —donde se halla el pico más alto a nivel nacional, Bobotov Kuk, de 2.522 m—, el Parque Nacional de Lovcen (64 km²), el Parque Nacional de Biogradska Gora (54 km²) y el Parque Nacional de Lago Skadar (400 m²).