Los arrecifes de coral son un reflejo de toda la sabiduría que habita el alma de la naturaleza. Conocidos como “las selvas del mar” por su biodiversidad, estos ecosistemas sumergidos hacen posible la vida de una gran variedad de especies además de las de coral, entre ellas, peces de diversos tipos, esponjas, crustáceos, moluscos, estrellas de mar y erizos, así como numerosas algas. Debido a la crisis climática, ahora su inteligencia ancestral corre peligro. Protegerlos es una prioridad para Iberostar, que trabaja activamente por su restauración en el Caribe. 

 

 

La compañía acaba de inaugurar dos nuevos viveros de coral en República Dominicana, uno en el Complejo Iberostar Bávaro en Punta Cana y otro en el hotel Iberostar Waves Costa Dorada, en Puerto Plata. Estos espacios, creados para la investigación científica y la restauración activa, se suman a los cinco que ya tenía; dos de ellos, en su resort de Playa Paraíso, en México. La recuperación de dunas y áreas verdes en los destinos complementa su compromiso con la salud costera. ¿Quieres saber más sobre cómo se forman los arrecifes de coral, dónde se localizan o qué tipos hay? A continuación, te damos todas las claves para entenderlos.

 

 

¿Cómo se forman los arrecifes de coral?

La explicación de cómo se forman los arrecifes de coral resulta, cuanto menos, asombrosa. El carbonato de calcio segregado por los corales duros crea una base para que sus descendientes puedan asentarse y sobrevivir. Con el tiempo, esa materia acumulada en los fondos marinos da lugar al arrecife. Podría afirmarse que éstos hábitats son una expresión del amor que los progenitores coralinos le profesan a sus retoños. Pero la cosa no acaba ahí: otros animales y plantas también colaboran en su construcción. Algas, esponjas e incluso algunos moluscos como almejas y ostras se suman a su arquitectura, dejando allí sus cuerpos cuando mueren, que a su vez sirven como cimiento para los nuevos corales. Además de con el amor, los arrecifes de coral también tienen que ver con otro poderoso instinto de los seres vivos, el de unión o comunidad.

 

 

Tipos de arrecifes de coral

Existen varios tipos de arrecifes de coral. La clasificación más común los divide en cuatro: los bordeantes o costeros, los de barrera, los de parche y los atolones. Te contamos en qué consiste cada uno de ellos y cómo diferenciarlos. 

  • Arrecifes bordeantes o costeros

Como su propio nombre indica, los arrecifes bordeantes o costeros se asientan cerca de las costas, alrededor tanto de islas como de continentes. Están separados de la orilla por lagunas estrechas y poco profundas, absorben el impacto de las olas y protegen a las costas de la erosión. Además, filtran el agua y limpian la arena; por lo que, gracias a ellos, puedes disfrutar de playas de arena blanca y de aguas cristalinas durante tus vacaciones en los destinos con mayor concentración de arrecifes, como México y República Dominicana (regresaremos a ello más adelante).

  • Arrecifes de barrera

Los arrecifes de barrera también ejercen esta importante función. Al igual que los anteriores, se sitúan cerca de las líneas costeras, aunque algo más alejados y en lagunas más profundas. En algunos puntos sobresalen del agua, por lo que se convierten en barreras para la navegación, de ahí que se denominen así. 

  • Arrecifes de parche

De todos los tipos de arrecifes de coral, los de parche son los más pequeños y también los que están más aislados. Crecen en el fondo abierto de las plataformas insulares o continentales; y se localizan entre los arrecifes costeros y los de barrera. 

  • Atolones

Por último, los atolones son aquellos arrecifes del mundo que, con el paso del tiempo, van adquiriendo una forma de anillo. Suelen estar en medio del mar; y acostumbran a aparecer cuando las islas rodeadas de arrecifes se hunden o cuando sube el nivel del agua a su alrededor. 

 

Arrecifes de coral en el mundo

Como ya hemos visto, los arrecifes de coral del mundo actúan como guardianes de los océanos y también de las playas, garantizando su buen estado y conservando intacta su belleza para que todos podamos disfrutar de ellas, incluidos los animales. Aunque se reparten a lo largo de seis de los siete continentes y por más de cien países, se concentran sobre todo en zonas cercanas al ecuador, donde las aguas son más cálidas.

 

La Gran Barrera de Coral

Alrededor de la mitad de todos los arrecifes del planeta se ubican en sólo seis países: Australia, Indonesia, Filipinas, las Islas Fiji, Maldivas y Papúa Nueva Guinea. Los arrecifes de coral más grandes del mundo están en Australia, siendo la Gran Barrera de Coral el más extenso y también la mayor estructura viva del planeta, con 2.600 kilómetros de longitud. ¡Incluso puede verse desde el espacio! Está integrado por más de 300 arrecifes menores, otros tantos cayos y 650 islas.

 

 

Arrecife Palancar

El Arrecife Palancar está en México, dentro del Parque Nacional Arrecifes de Cozumel y cerca de la Península de Yucatán. Fue declarado Patrimonio de la Humanidad en 1996. En él viven numerosos animales, algunos en peligro de extinción en México, como la tortuga caguama o boba, por lo que preservarlo resulta de vital importancia. El Hotel Iberostar Waves Cozumel cuenta con un vivero de corales ubicado en este arrecife, que gestiona el equipo científico de Iberostar. 

 

Barrera de Coral de Belice

La segunda barrera de coral de mayores proporciones, con más de 1.000 kilómetros de largo, también se sitúa en el Caribe, abarcando todo el litoral de Quintana Roo, en México, además de Belice, Guatemala y Honduras. Quizás su punto más conocido sea el denominado Gran Agujero Azul o simplemente, el Ojo, desde que en la década de los 60 el oceanógrafo Jacques Cousteau llevase a cabo una arriesgada inmersión en él.

 

Arrecife de Raja Ampat

Situado en Indonesia, forma parte del llamado Triángulo de Coral. Según los estudios científicos, podría ser el más rico y diverso de todos los arrecifes de coral del mundo. Se estima que en él hay hasta 505 especies de coral y más de 800 sólo de peces. Los ecosistemas coralinos se localizan en zonas con clima tropical, también en países como la República Dominicana, Venezuela o Nicaragua. Una buena manera de conocerlos es practicar el snorkel o el buceo durante tus vacaciones, siempre con respeto y sin interferir en el hábitat: ¡el turismo sostenible no está reñido con el disfrute!

 

 

 

Seguro que, la próxima vez que escuches hablar de los arrecifes de coral, a esas imágenes de postal que desde el principio de los tiempos han ido nutriendo su imaginario, también se suman la conciencia y la fascinación de saber que detrás de esos colores vibrantes, de esas especies de animales y plantas exóticas y de ese mar siempre turquesa, hay mucho más. Sólo te queda elegir un cómplice que apoye esta filosofía antes de emprender tu próxima aventura. Si te alojas en los hoteles de Iberostar, ayudarás a cuidar de los mares y de las costas mientras descansas y te diviertes dentro de esa postal que, ahora sí, es una foto real del paraíso.