Fecha de publicación 01/06/2017
Turismo sostenible Principales tendencias en sostenibilidad hotelera
Los hoteles de todo el mundo están empezando a apostar por la sostenibilidad por razones ecológicas y por cuestiones de RSC que cada vez más valoran los clientes.
El pasado mes de diciembre, la Asamblea General de la ONU designó 2017 como el Año Internacional del Turismo Sostenible para el Desarrollo, dando el pistoletazo de salida para un plan ambicioso a largo plazo con el fin de construir un sector turístico más responsable y con mayor concienciación social. Y el potencial es enorme. El turismo ocupa a uno de cada once trabajadores del planeta y supone el 10% del PIB mundial lo que significa que esta industria se puede convertir en un líder a nivel global, sobre todo en la lucha por la conservación del medio ambiente.
En el contexto de la sostenibilidad hotelera, las cuestiones medioambientales han crecido en importancia, pasando de ser una causa social marginal al ámbito de las buenas prácticas empresariales. Y el uso de la energía está a la vanguardia de estas preocupaciones ambientales, especialmente en la industria hotelera, donde las prácticas de energía inteligente se están incorporando a la Responsabilidad Social Corporativa de las empresas.
En esta línea Laura Molano, directora general corporativa de Marketing de Iberostar, aseguró: "En el año 2017 en que se declaró el Año Internacional del Turismo Sostenible para el Desarrollo, iniciativas como la 'Hora del Planeta' desempeñan un papel crucial en la sensibilización de la sociedad sobre la importancia vital de las acciones como el ahorro de energía. El Foro de Innovación Sostenible COP21 estableció un objetivo claro para el final del siglo y depende de cada uno de nosotros asegurar que nuestros hábitos contribuyan a proteger el planeta en que vivimos, convirtiendo nuestro medio ambiente en un lugar de prosperidad y bienestar ".
El Foro COP21 es sólo uno de los muchos puntos de referencia que las empresas están utilizando para convertirse en consumidores responsables del planeta. Los hábitos de las prácticas ambientalmente responsables están pasando de los gestos locales e intermitentes a compañías de renombre e impacto internacional. Además, Iberostar está adherida al Pacto Mundial por la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) conformado por 17 metas definidas en pos de erradicar la pobreza, proteger el planeta y asegurar el futuro y la prosperidad para todos en el futuro.
Los gestos pueden tener un impacto real. Junto con miles de empresas e individuos en 187 países, Iberostar se ha sumado cada año a la celebración de la Hora del Planeta, una campaña de sensibilización global que pide a los consumidores que apaguen sus bombillas durante 60 minutos para llamar la atención sobre las consecuencias del uso de combustibles fósiles. Desde sus inicios como causa en 2007, el movimiento ha crecido en línea con la creciente preocupación del mundo por el ecologismo y el cambio climático. Desde Palma de Mallorca a Nueva York, desde Sudáfrica hasta Río de Janeiro, monumentos, casas, hoteles y restaurantes apagaron sus luces para resaltar el impacto que los seres humanos tienen en el planeta y para concienciar sobre el cambio del clima. Su impacto fue tan grande que se pudo ver desde el espacio.
Cuando las personas, a modo individual, apagan las luces durante una hora, es una muestra de solidaridad, aunque también limitada. Sin embargo, cuando se trata de una cadena de hoteles, el impacto es tan importante como cuantificable. La filosofía del “si tú lo haces, yo lo hago” adquiere un significado especial en el escenario mundial. Aprovechando los recientes avances tecnológicos, Iberostar Hotels & Resorts ha ido incrementando su uso de luces y televisores LED, lo que tiene como resultado un descenso del consumo energético del 85% y una caída del 80% en las emisiones de CO2.
Otro ejemplo de estas buenas prácticas es el de los ascensores del hotel Iberostar Selection Playa Mita en Riviera Nayarit , los cuales almacenan la energía cinética que generan sus movimientos para reutilizar y ahorrar hasta la mitad de consumo. Asimismo, un avanzado sistema de aire acondicionado utiliza un sistema magnético que lo hace más eficiente. Como parte de su política medioambiental global, Iberostar ha invertido más de 33 millones de euros en la mejora de los hábitos de consumo de energía en sus más de 100 hoteles en todo el mundo.
En el hotel en Jamaica , se está utilizando un sistema virtual similar que detecta puertas abiertas y espacios desocupados y controla el funcionamiento de neveras, bombas de calor, calderas y sistemas eléctricos, lo que da como resultado una reducción de más del 5% en el consumo de energía. Pero la reducción del consumo de energía es solo la punta del iceberg de los desafíos de la sostenibilidad hotelera.
En el pasado, los artículos desechables como los amenities eran, a veces, un signo de opulencia que se valoraba positivamente, pero los tiempos están cambiando. Cada vez es mayor el sentimiento de rechazo hacia las empresas que no reutilizan o que despilfarran sin sentido. En esta línea, muchos hoteles se están moviendo más allá de los gestos superficiales de pedir a clientes utilizar sus toallas un día más o simplemente ofrecer menos amenities.
Todo este cambio radical en la cultura corporativa está arrojando resultados reales para la salud del planeta. La idea sencilla de Iberostar de sustituir 420.000 vasos desechables por reutilizables ha conseguido eliminar hasta 8.000 kg de emisiones de CO2 cada año. Sus amenties están empaquetadas en materiales biodegradables, ahorrando 90 toneladas de emisiones de CO2 anualmente. Con estos pasos proactivos en la reforma de la política de la empresa no solo los empleados adoptan enfoques ambientales más sensatos en el día a día, sino que se transmite a sus clientes.
Tanto Iberostar como la mayoría de sus hoteles han sido reconocidos con diversos certificados internacionales. Entre ellos destaca ISO 14001, un estándar que certifica a las empresas que demuestran la reducción de sus costes mediante un tratamiento adecuado de los residuos y el uso eficiente de los recursos naturales locales; Greenglobe, que reconoce a las empresas que utilizan la innovación y la tecnología para mejorar la gestión medioambiental; y Greenkey , un estándar de excelencia que se centra en las compañías y establecimientos turísticos.
El concepto de una cuidada integración en el entorno natural ha sido a veces un punto de discordia en el sector de la hotelería. Particularmente en los países en desarrollo en lugares exóticos, la construcción de hoteles y resorts puede causar daños tanto al entorno como a las comunidades locales. Frente a la poca o ninguna regulación al respecto, la iniciativa recae sobre los hombros de los líderes de este sector.
SHAWN MOKSVOLD
Imágenes de Cordon Press y Getty Images