Yoga frente al mar: encuentra tu equilibrio
¿Sabías que hacer yoga en la playa incrementa los beneficios físicos, emocionales y espirituales que esta filosofía ancestral tiene para tu vida? Además de ayudarte a encontrar el equilibrio más rápidamente, las vistas al mar, el sonido del oleaje y la caricia de la brisa salada te conectarán con el aquí y ahora a través de los sentidos. Y, aunque el mejor lugar para practicar siempre será tu propia presencia, escoger un rincón especial junto a la orilla, en la naturaleza, te recordará hasta qué punto tú también formas parte de ella.
A continuación, compartiremos contigo algunas poses de yoga en la playa aptas para todos los niveles. También te contaremos cuál es la hora del día más recomendable para practicar yoga frente al mar, cómo hacerlo durante tus vacaciones y por qué las asanas (así se conoce a las posturas de yoga en sánscrito) dentro del agua son una buena idea.
¿Por qué hacer yoga en la playa?
¿Estás iniciándote o retándote con nuevas posturas? Practicar yoga frente al mar contribuye a aumentar la confianza y seguridad al afrontar ciertas poses, como las invertidas. La arena amortigua los impactos y aumenta el equilibrio. Además, al pasar tiempo en el exterior y en contacto directo con la luz solar, estarás produciendo vitamina D y serotonina mientras te mantienes en forma. El aire puro del mar aumentará tu oxigenación. La música de las olas se convertirá en tu mejor banda sonora.
Yoga en la playa al amanecer
Los atardeceres junto al mar están bien, pero el yoga en la playa al amanecer cuenta con una frecuencia energética única. Esa energía de alta vibración se sincronizará con la tuya al empezar el día. Disfrutarás de las ventajas que entregarte a la práctica en uno de los paisajes más relajantes que existen y sin distracciones. Pondrás cuerpo y mente en armonía; permitiéndote observarte sin juicios, regresar a tu centro y meditar en movimiento. Primero, respira y saluda al sol con gratitud. Luego, crea tu propia serie con las siguientes poses de yoga en la playa.
Poses de yoga en la playa
Vrksasana o postura del árbol
Vrksasana, más conocida como la postura del árbol, representa la conexión con la tierra y la fortaleza. Transmite quietud física y mental. Para adoptarla, has de enraizarte a la arena con los dedos de los pies y, poco a poco, elevar una pierna hacia el pecho para, inmediatamente después, abrirla hacia afuera, apoyando la planta en el interior de la rodilla. Coloca tus manos en postura de oración o elévalas por encima de la cabeza. ¡Y no te olvides de respirar! Prueba el yoga en el mar cuando practiques esta asana: además de trabajar tu estabilidad sumergiendo las piernas en el agua, aprenderás a anclar todas las emociones que vayan surgiendo.
Virabhadrasana o postura del guerrero I
La postura del guerrero I o Virabhadrasana ejercita la fuerza, la movilidad y el equilibrio tanto físicos como mentales. Toma una inhalación profunda y, con las caderas orientadas hacia delante, lleva una de tus piernas hacia atrás, doblando la rodilla contraria en ángulo recto. Puedes apoyar la planta del pie de atrás o mantener el talón elevado. Simultáneamente, con el tronco erguido, eleva tus brazos por encima de la cabeza. Exhala y mantén la pose durante al menos tres respiraciones.
Con el programa Aliveness de Iberostar, podrás profundizar en esta y otras asanas de yoga frente al mar durante tu estancia. ¿Viajas al Caribe? En Iberostar Waves Cozumel, un resort de cinco estrellas ubicado en plena naturaleza, disfrutarás de actividades enfocadas al mindfulness y al deporte al aire libre. Además de por sus arrecifes de coral y sus playas paradisíacas, la isla de Cozumel también es célebre por sus tradiciones ancestrales, que te mostrarán el lado más místico de México.
Sarvangasana o postura de la vela
Sarvangasana o la postura de la vela es una de las poses de yoga en la playa invertidas más sencillas. Con ella, ejercitarás la paciencia y te enfrentarás a la ansiedad de estar en una posición insólita. Tu sistema nervioso se regenerará, como después de una siesta o de un ritual de hammam. Túmbate boca arriba y, lentamente, eleva las piernas desde la cadera, hasta que queden rectas. Levantando el coxis, coloca ambas manos en la zona lumbar para sostener el cuerpo, con los pies estirados hacia el cielo y la mirada en el ombligo. Es importante que no voltees la cabeza para no dañar tus cervicales. Si tienes problemas en el cuello, mejor optar por otra asana. Al bajar, hazlo despacio y con las rodillas dobladas hacia los hombros, haciéndote una bolita hasta que tu espalda esté completamente apoyada.
Kapotasana o postura de la paloma
¿Sabías que existe el Día Mundial de la Abstinencia Digital? La postura de la paloma, Kapotasana en sánscrito, te ayudará a desconectar tanto de las redes como del ruido externo, a liberar emociones y a combatir la rigidez. Partiendo del perro boca abajo, eleva una de las piernas hacia atrás, para luego llevar la rodilla en dirección a la muñeca del mismo lado y el pie, a la otra mano. Mantén el tronco elevado, las palmas firmes sobre la arena, los brazos estirados y la mirada al frente. Respira y… siente.
Ahora, imagínate volviéndote ave en una de las mejores costas de España para hacer yoga en la playa al amanecer. Allí, frente a La Barrosa, se ubica Iberostar Selection Andalucía Playa un resort de cinco estrellas con filosofía hedonista donde, además de jugar al golf en un club diseñado por Severiano Ballesteros, tendrás la posibilidad de sumarte a sus sesiones de yoga en la playa.
Yoga en el mar
Gracias a ecosistemas marinos como la Posidonia oceanica en el Mediterráneo o los arrecifes de coral en el Caribe, la calidad cristalina y repleta de minerales de los destinos de tus vacaciones penetrará a través de tu piel y se unirá a ti en tu práctica. Puedes hacer yoga en el mar o acuayoga sumergiendo parte de tu cuerpo en el agua salada para absorber sus iones negativos, con múltiples bondades para la salud, como la reducción del estrés, la mejora del sueño o el aumento de la concentración. Ejercitarás la musculatura con mayor intensidad por el elemento líquido que, a su vez, también ayudará a que tus movimientos ganen fluidez. También se ha popularizado el SUP yoga o stand up paddle, practicado sobre una tabla. Apúntate a las clases con maestros expertos de los resorts Iberostar, con sesiones de yoga en la playa y mucho más.
