El mar está habitado por criaturas fascinantes. Algunas de ellas son tan desconocidas para el ser humano que su descubrimiento reformula el lugar que nuestra especie ocupa en el todo. En las profundidades, donde comenzó la vida, prospera desde el origen de los tiempos un crisol de animales marinos raros para los ojos que miran desde la superficie, pero que han estado ahí desde siempre; velando por la armonía planetaria. Cuidando, en silencio, del resto.
Por eso, protegerlos es protegernos. Hay acciones concretas que contribuyen a ello. Por ejemplo, apostar en la medida de lo posible por el consumo de pescado y marisco procedentes de fuentes de pesca responsables o poner en práctica estas ideas de turismo sostenible durante los viajes, especialmente en los destinos de costa. Pero ¿quiénes son y dónde viven? Para que los conozcas un poco mejor, a continuación te hablaremos de algunos de los animales marinos más raros del mundo.
Animales marinos raros y bonitos
Pez loro (Scarus ghobban)
Mar Caribe; Riviera Maya, México
El pez loro es uno de esos animales marinos raros y bonitos cuya existencia no sólo nutre la gran biodiversidad que existe en el Mar Caribe, sino que también contribuye a mejorar el mundo. En concreto, este simpático ser de alegres colores que van del azul al verde, al naranja, al rosa o al morado (de ahí su nombre) rebaña los esqueletos de calcio de los corales con su boca en forma de pico, para después excretarlos como arena blanca. Y, gracias a esa arena blanca, tú puedes disfrutar de playas paradisíacas como las de la Riviera Maya, en México, durante tus vacaciones.
Al igual que otras especies mexicanas, el pez loro se encuentra en peligro de extinción. Una buena manera de acercarse a su entorno sin interferir en él es practicar el buceo controlado para, de paso, descubrir la magia de los arrecifes coralinos. A través de los diving center con los que Iberostar colabora en sus hoteles Todo Incluido del Caribe, tendrás la posibilidad de adentrarte en estos universos sumergidos.
Tortuga carey (Eretmochelys imbricata)
Océano Atlántico, Océano índico-pacífico y Mar Caribe; Punta Cana, República Dominicana
Junto con la tortuga verde y la tortuga caguama, es una de las especies protegidas que, año tras año, acuden a desovar a las playas de Punta Cana, en República Dominicana. Cuenta con una boca puntiaguda y con un curioso caparazón con los bordes de sierra que, según la edad de la tortuga, va adquiendo diferentes matices marrones, verdosos y amarillos. Se alimenta de esponjas (sus presas predilectas) y de otros invertebrados como las medusas. Pasa la mayor parte de su vida en mar abierto, aunque a temporadas también se la localiza en las lagunas poco profundas y en los arrecifes de coral.
Además de bucear con tortugas mientras te alojas en hoteles de cinco estrellas conectados al mar como JOIA Bávaro by Iberostar o Iberostar Selection Coral Bávaro, en el Complejo Bávaro también podrás visitar el Coral Lab de Iberostar. Este espacio, al igual que todos los laboratorios de coral que Iberostar tiene en el Caribe, ha sido creado para la restauración y la investigación científica, dentro de un plan global para proteger a los arrecifes y otros hábitats costeros, como la Posidonia oceanica en el Mediterráneo o los manglares en República Dominicana, de los efectos de la crisis climática. De este modo, la compañía contribuye directamente al cuidado de los océanos con sus iniciativas.
Pez golondrina o pez murciélago (Dactylopterus volitans)
Océano Atlántico y Mar Mediterráneo; Islas Baleares, España
Entre los animales marinos más raros del mundo, destaca una especie que se ha extendido desde algunas zonas del Océano Atlántico hasta las costas del Mar Mediterráneo. Se trata del pez golondrina o pez murciélago, también conocido como roncador. ¿Su mayor peculiaridad? Que tiene alas. Cuando está tranquilo, su cuerpo alargado apenas se diferencia del de otros peces. Sin embargo, al inquietarse, una reacción instintiva le lleva a desplegar sus extremidades, semitransparentes y aerodinámicas, de un color azul fluorescente en las puntas para ahuyentar a los posibles depredadores. Quizás tengas la suerte de ver uno la próxima vez que te alojes en uno de los hoteles de Iberostar en Mallorca: la fascinación será inmediata.
Animales marinos raros y peligrosos
Avispa de mar o medusa de caja (Chironex fleckeri)
Océanos Índico y Pacífico; norte de Australia/sudeste de Asia
La avispa de mar, también conocida como medusa de caja, es uno de los animales marinos raros y peligrosos más temidos de los Océanos Índico y Pacífico. Posee un veneno letal que le sirve para defenderse. También lo utiliza para paralizar a sus capturas, pues se trata de un cefalópodo carnívoro. Debido a esta sustancia, no tiene casi depredadores naturales, a excepción de un tipo de tortuga que sí puede alimentarse de ella. Resulta poético que se sienta atraída hacia la luz y que, por ello, se aleje de los cuerpos oscuros al mismo tiempo que, al llegar el día, nada más lentamente que por las noches. Se cree que es muy sensible a las vibraciones y que se comunica de forma química con otros individuos de su especie.
Pulpo de anillos azules (Hapalochlaena)
Océanos Índico y Pacífico; desde Japón hasta Australia
Puede que por desconocimiento, puede que por el éxtasis sensorial que provocan, muchos individuos que se consideran animales marinos raros son seres invertebrados. El pulpo de anillos azules nada a sus anchas por los Océanos Índico y Pacífico, entre las costas de Japón y de Australia, con una extraña belleza hecha de poder y magnetismo. Su piel es de color amarillo, con unos caractectíscos anillos marrones bordeados por un azul vibrante, aunque en ocasiones cambian de tonalidad para mimetizarse con el entorno. A pesar de su reducido tamaño (apenas llegan a alcanzar una longitud de entre cuatro y seis centímetros), exhalan una sustancia muy venenosa que puede acabar en segundos con peces grandes.
Carabela portuguesa (Physalia physalis)
Océanos Atlántico tropical, Pacífico e Índico
A la carabela portuguesa se la confunde con una medusa, pero en realidad se crea como un organismo colonial, formado por varias partes que tienen entidad propia, y que cooperan entre ellas para dividirse el trabajo. Sí, este tipo de ser que probablemente nunca te habrías imaginado, uno de los animales marinos más raros del mundo, existe. Prueba de ello es que se muestra en un cuerpo conjunto transparente, con bordes violetas, azules o plateados; integrado por una vela gelatinosa, gracias a la cual recorre los mares, y numerosos tentáculos con cápsulas de veneno, además de glándulas reproductivas. Se podría definir como un animal hecho de varios animales, o como una suerte de Frankestein acuático, pero eso no sería del todo exacto. Más bien, representa la gran diversidad que puede contener la palabra vida; y la importancia de la colaboración para la supervivencia.
Seguro que, ahora que sabes algo más acerca de estos animales marinos raros, su presencia no te parece tan ajena a la de un mamífero o una planta que riegas a diario. Todos tienen en común que se relacionan con sus ecosistemas para tejer una red, como las distintas partes de la carabela portuguesa. Por este motivo, velar por la salud de las costas, los mares y sus habitantes es una prioridad para Iberostar: sólo así, ellos seguirán velando a su vez por la de todo el planeta en el futuro.