Fecha de publicación 26/08/2019
Turismo sostenible Más allá de las playas: ecoturismo en República Dominicana
Bienvenido al Caribe en estado puro
República Dominicana es un país con mucha vida que tiene por marco que tiene por marco una naturaleza prodigiosa que hace de esta isla alegre un paraíso para el ecoturismo. Parques nacionales, reservas ecológicas, bosques húmedos, zonas desérticas, acantilados, cuevas, saltos de agua… conforman un mosaico de paisajes que, según un estudio, inciden en que este país registre el más alto grado de felicidad de toda América Latina.
Son muchas las opciones para entregarse a aventuras que persiguen el disfrute natural, pero con el menor impacto al medioambiente; actividades que están enfocadas a la diversión en las múltiples áreas verdes, pero dentro de la conservación del entorno y del respeto a las comunidades locales.
Los hoteles en República Dominicana de Iberostar Hotels & Resorts acercan al visitante a los rincones más bellos de la isla a través de 6 lujosos complejos situados en Bayahibe, Playa Bávaro y Puerto Plata.
Esta modalidad de turismo responsable ha calado con fuerza en la isla en todas sus manifestaciones: desde el deporte extremo hasta el agroturismo, pasando por las aguas termales, los grandes resorts y hoteles o la simple contemplación de la flora y la fauna.
Todo selva
Y para disfrutar de esta exuberancia natural no hace falta alejarse demasiado de la playa. En los hoteles en Punta Cana de Iberostar, se siguen criterios sostenibles, se puede dar, de pronto, un paseo por la jungla en la Reserva Ecológica Ojos Indígenas. Más de 600 hectáreas de bosque, en el que las doce lagunas de aguas cristalinas dan nombre al parque protegido: para los aborígenes, por su peculiar forma, se trataba de los ojos de la selva.
También existen manantiales, plantas estrambóticas y especies nativas de fauna. En esta discreta reserva el ecoturismo pasa por el senderismo, los paseos a caballo y los chapuzones en agua dulce.
También en el este de la isla se esconde la laguna de Bávaro, que forma parte de una extensa zona de humedales. Aquí, en este remanso de paz de unos tres kilómetros cuadrados, se puede practicar kayak y pesca deportiva, navegar plácidamente en bote o dedicarse a la observación de las aves a través de los manglares.
El recientemente renovado hotel 5 estrellas con todo incluido Iberostar Selection Bávaro Suites tiene un atractiva ubicación entre exuberantes jardines tropicales y la increíble Playa Bávaro, una impresionante playa de finísima arena blanca y aguas de un intenso color turquesa.
Y para más naturaleza, la que se esconde en las entrañas. La cueva Fun Fun es un laberinto de túneles y corredores que serpentean entre estalactitas y estalagmitas, mientras que la De las Maravillas es un museo gótico subterráneo en el que admirar los petroglifos que pintaron los indios taínos.
¿Relax o adrenalina?
Hacia el sur la isla adopta el paisaje de las Antillas con su combinación de ecosistemas: campos áridos, terrazas marinas, costas rocosas, termas, arrecifes de coral… Es la zona de Pedernales la que acoge el Parque Nacional de Jaragua, junto a la sierra de Bahoruco y el lago Enriquillo, el mayor de República Dominicana.