Nueva York, una de las grandes metrópolis del mundo, tiene una infinidad de planes que hacer, monumentos que ver y restaurantes que probar. Esta es una guía totalmente genuina para descubrir lo mejor de la ciudad en 48 horas para todos aquellos que se queden en el corazón de la Gran Manzana.
PATRICIA SERRANO CHUNGSATHAPORN
Curiosear en el mercado de productores locales de Union Square
Cientos de variedades de frutas y hortalizas frescas locales recién elegidas, carnes ecológicas, quesos premiados, panes artesanales, mermeladas, flores, plantas, vino, sirope de arce y mucho más se pueden encontrar en este lugar. Desde sus humildes comienzos en 1976, el ahora mundialmente famoso Union Square Farmer's Market ha pasado de contar con unos pocos vendedores a congregar a más de 140 agricultores, pescadores y panaderos de la región. Ubicado en uno de los grandes espacios públicos de la ciudad de Nueva York, el ambiente en Union Square en un día de mercado es animado, con más de 60.000 clientes que disfrutan charlando con los paisanos y viendo demostraciones de cocina por algunos de los chefs locales más de moda de Nueva York.
PATRICIA SERRANO CHUNGSATHAPORN
Pasear por el High Line
Atravesar este parque público construido sobre una histórica línea de ferrocarril elevada por encima de las calles en el West Side de Manhattan es un auténtico placer. Comprende 12 manzanas desde Gansevoort Street en el Meatpacking District hasta West 34th Street, entre las avenidas 10 y 12.
Con más de 2 km de plantas únicas, flores y vistas al lado oeste de Manhattan, la línea ferroviaria elevada que recorría la ciudad ahora se llama High Line. Además de brindarte la posibilidad de ver las estrellas y de asistir a exposiciones y eventos semanales, esta vía de trenes de mercancías en desuso es hoy un bonito camino que conduce a Hudson Yards. Allí se halla The Vessel, una maravilla arquitectónica que alberga una red de escaleras interconectadas que forman una gran colmena, inaugurada el 15 de marzo de 2019.El recorrido a pie tiene varias paradas obligatorias como el Parque de la Plaza de la Avenida 10 o el Overlook, un anfiteatro al aire libre con vistas al río Hudson y a la Estatua de la Libertad. Otro plan imprescindible es hacer un pícnic en la pequeña pradera de la Calle 23, el único tramo del parque en el que hay una pradera, o sentarse en una hamaca en el Sundeck de von Furstenberg. El paseo termina en el mirador de la Fundación Tiffany & Co., un espectacular balcón que ofrece vistas al Meatpacking District y al museo Whitney.
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Pasear en bicicleta por Central Park
Central Park, uno de los parques más famosos del mundo, tiene más de 25 millones de visitantes al año. El primer parque público construido en América se encuentra en medio de la concurrida Manhattan, en el corazón de la ciudad, y se merece un día entero vagando por las 840 hectáreas diseñadas por Frederick Law Olmsted. Montar en bicicleta a través de las esculturas, monumentos y fuentes que conmemoran a personajes como Colón, Beethoven, Duke Ellington, John Lennon, Alicia en el País de las Maravillas... siempre es una buena idea. Otro entretenimiento es observar aves, ya que hasta 230 especies de aves viven en estos treinta y seis acres de senderos sinuosos, rocas y arroyos.
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Asiste a un partido de los Yankees
De los más de 40 equipos profesionales que forman la MLB (la liga de béisbol profesional de Estados Unidos), los New York Yankees son el equipo más conocido y el que cuenta con más seguidores en todo el mundo. No te preocupes si no entiendes el reglamento: el mero hecho de presenciar uno de los partidos de los New York Yankees en el Yankee Stadium es una experiencia per se. Levántate del asiento de pura emoción junto a 50.000 aficionados y disfruta de un entretenimiento típicamente americano.
Admira Nueva York desde una perspectiva única
¿Quieres descargar adrenalina y contemplar Nueva York y su increíble skyline? Las vistas desde un helicóptero son todo cuanto necesitas. No volverás a ver la Gran Manzana con los mismos ojos después de disfrutar de esta perspectiva única de los rascacielos.
Y si buscas emociones aún más fuertes, FlyNYon te ofrece la posibilidad de realizar el vuelo con las piernas colgando fuera del helicóptero. Una auténtica experiencia a vista de pájaro.
Prueba algo nuevo en el mercado de Smorgasburg
El animado barrio de Williamsburg es un lugar ideal para empezar a descubrir Brooklyn. Si tu viaje a Nueva York tiene lugar entre abril y octubre, no dejes pasar la oportunidad de visitar el mercado de Smorgasburg, con cientos de vendedores apostados junto a East River. En este mercado, también conocido como el Woodstock de la Comida, podrás probar todo lo que puedas imaginar, mientras disfrutas de unas vistas privilegiadas sobre Manhattan.
Después de comer y de hacer algunas compras, date un paseo para explorar el cercano Domino Park, un evocador parque que ofrece vistas inolvidables que te dejarán sin aliento.
Cenar en el Chelsea Market
Cuando cae la tarde, el plan perfecto es caminar a través del Chelsea Market de un extremo a otro probando los diferentes alimentos que los puestos ofrecen a los visitantes. Con 6 millones de visitantes al año, el mercado de Chelsea es uno de los más populares y que más titulares protagonizan en todo el mundo. Con más de treinta y cinco tiendas que venden de todo, desde sopa a tarta de queso sin olvidar Pad See Ew, aburrirse o pasar hambre no es una opción.
PATRICIA SERRANO CHUNGSATHAPORN
Emociónate con los musicales de Broadway… ¡y de Disney!
Tras el éxito de El Rey León, Aladdin es el musical de Disney que ahora triunfa en Nueva York. Más de 30 bailarines sobre el escenario y unas electrizantes coreografías te harán sentir la legendaria magia de Broadway. El espectáculo se lleva a cabo en el mítico New Amsterdam Theater, construido en 1902 y conservado como lugar histórico por las autoridades de la ciudad de Nueva York.
Las canciones han sido creadas exclusivamente para este espectáculo familiar, al que los críticos locales sitúan “a la altura de los mejores musicales de todos los tiempos”.
Prepárate para volar en la alfombra mágica del genio. Cuando acabe la función, date una vuelta por el distrito de Manhattan; Broadway acoge más de 40 teatros de primer nivel que ofrecen todo tipo de espectáculos.
Visita un museo de arte
Sí, hay un museo por cada gusto estético en la ciudad. Nueva York alberga algunas de las obras de arte más importantes de todas las épocas: Antigüedad, Renacimiento, Barroco, Impresionismo, Las Vanguardias y tendencias contemporáneas. ¿Una recomendación? Comprobar las fechas y programas de las noches gratis en museos como el Metropolitan, el MoMA, el Whitney o el Guggenheim.
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Ir al ballet o a la ópera en el Lincoln Center
Disfrutar de ‘La bella durmiente’, ‘El lago de los cisnes’ y otros ballets de fama mundial, o de óperas como 'Carmen' y 'Madame Butterfly' en el Lincoln Center uno de los más grandes centros de artes del mundo, es una gozada. Situado en el Upper West Side, su programación ecléctica está llena de eventos que cambian a diario. Antes o después del espectáculo, puedes y debes pasear por sus jardines y tomar una foto delante de su preciosa fuente.
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Brunch en Nolita
El domingo, en el moderno barrio de Nolita en Manhattan, es tiempo de brunch. Y lo bueno que tiene esta zona es que se pueden disfrutar de sus deliciosos platos en una amplia gama de ambientes. El icónico Balthazar es el brunch que un neoyorquino (y visitante) debe probar al menos una vez. Lovely Day ofrece su brunch de varias maneras: con huevos camperos, una selección de sándwiches y platos de arroz frito de inspiración japonesa. Los amantes del huevo deben dirigirse a Egg Shop. Aquí pueden disfrutar del ingrediente estrella, el huevo en plato o en sándwich, con diferentes aderezos. En The Butcher's Daughter, la tostada de aguacate reina en un bar que ofrece zumos, café y una 'matanza de verduras' de ingredientes locales y de temporada. Por último, en el Café Habana, el brunch se caracteriza por maridar caipirinhas y sangría helada con huevos rancheros, tostadas challah y chilaquiles verdes con pollo.
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En ferry a Staten Island o a Red Hook
Coger un ferry es siempre la mejor opción para disfrutar de unas vistas diferentes de Manhattan desde varios puntos de vista. El que va a Staten Island es gratis y solo dura 25 minutos. Una vez en la isla, se deben disfrutar de sus museos, paisajes históricos, playas y parques, incluyendo el único bosque de la ciudad: el cinturón verde de Staten Island. El taxi acuático de Ikea (también gratuito) parte del muelle 11, justo al lado del puerto de South Street, y te lleva a Red Hook (Brooklyn), donde puedes entrar en la bodega homónima donde se venden los mejores caldos de los viñedos del estado de Nueva York. Durante el verano, Governor's Island se convierte en la elección ganadora gracias a sus festivales que se pueden disfrutar, incluso, a bordo de los barcos.
PATRICIA SERRANO CHUNGSATHAPORN
De 'souvenirs' en Brooklyn Flea
Llevarse un recuerdo y que éste sea artesanal es posible en Brooklyn Flea. En su interior hay centenares de artículos, proveedores y tiendecitas que venden muebles, ropa vintage, coleccionables y antigüedades, así como una selección cuidadosamente seleccionada de joyerías, arte, productos de artesanía y de diseñadores locales, a lo que hay que sumar pequeños puestos de comida fresca deliciosa. Desde el primer fin de semana de abril a octubre, el mercado tiene lugar al aire libre los domingos en DUMBO. De noviembre a marzo, el mercado se resguarda en el interior.
PATRICIA SERRANO CHUNGSATHAPORN
Una comida en Smorgasburg
Ubicado en Brooklyn, Smorgasburg es un mercado de comida al aire libre gigante que se inauguró en mayo de 2011 y que tiene lugar los sábados en Williamsburg y los domingos en la Breeze Hill del Prospect Park. Con el tiempo se ha convertido en una visita obligatoria ya que muestra lo mejor de la escena de la comida artesanal de Brooklyn, con 100 vendedores locales y regionales.
PATRICIA SERRANO CHUNGSATHAPORN
Imágenes de Cordon Press
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