El Caribe marroquí está en Saïdia. Con sus 300 días de sol al año, sus playas de aguas turquesas y sus ecosistemas de mar, bosque y desierto, este rincón de la costa mediterránea de Marruecos tiene algo de postal detenida en el tiempo. En ese lugar mejor, los días transcurren lentos y las noches se alargan hasta el infinito. Sus costumbres y sus paisajes acogerán tus instantes más felices (y también tu sensación de asombro). ¿Qué hacer en Saïdia? Antes de emprender el viaje hacia este destino luminoso, inspírate con las siguientes recomendaciones de playas, planes y sitios donde la personalidad del Norte de África se muestra en todo su esplendor.

una persona parada en una puerta

La Medina

¿Qué ver en Saïdia después de disfrutar de sus playas? En el centro de la localidad se encuentra la Medina, su casco histórico. Perderse por su laberinto de plazas y calles equivale a adentrarse en el Marruecos más auténtico. Los cafés tradicionales marroquíes se alternan con las tiendas de artesanía o los puestos del mercado de abastos. No te pierdas la mezquita ni la Alcazaba, una fortaleza construida por el sultán Hassan I en el siglo XIX. Todos los domingos, se celebra el zoco, donde se ofrecen especias, textiles tejidos a mano y otros tesoros locales. 

Puerto deportivo y paseo marítimo

La Marina, el puerto deportivo de Saïdia en Marruecos, es uno de los más extensos y populares del país. La mejor hora para visitarlo es al atardecer, cuando las terrazas se llenan de vida y la exótica brisa y las tonalidades vibrantes del ocaso lo envuelven todo. Después de recorrer el paseo marítimo (también conocido como la Cornisa), no podrás resistirte a saborear algunas delicias de la gastronomía marroquí como el cuscús, el hummus o el tajín en uno de sus restaurantes típicos. Un té de menta y unas pastelas entre alfombras y cojines le pondrán el broche de oro a la velada. Porque hay mucho que ver en Saïdia, pero también mucho que saborear…

una mujer de pie frente a una gran formación rocosa

Hacer una ruta por el desierto

¿Qué hacer en Saïdia y sus alrededores después de alcanzar el relax? Una ruta por el desierto reactivará todos tus sentidos. Una vez allí, la forma más respetuosa de moverse es a pie. Así, te mantendrás activo mientras reduces tu huella de carbono. Se organizan recorridos guiados de más o menos duración y dificultad; algunos de ellos, con merienda o cena bajo las estrellas. En lo más profundo de Saïdia también se localizan cuevas subterráneas que entusiasmarán a los amantes de la espeleología. Algunas albergan grabados rupestres de gran valor. Es el caso de la Gruta de los Pichones, donde se cree que vivieron hasta cuatro civilizaciones prehistóricas distintas. Otras, como la Gruta de los Camellos, destacan por sus estalagmitas y estalactitas. Porque los viajes a Saïdia con Todo Incluido no están exentos de aventura.