Gastronomía de Marruecos y Túnez Las delicias árabes que serán una tendencia saludable
El futuro de la comida healthy viene del Medio Oriente
Tras la irrupción del humus y el cuscús en los menús de los restaurantes de todo el mundo, ahora llegan otros productos, ingredientes y recetas que seducen por su sabor y por ser beneficiosas para la salud. Es decir, superalimentos que se pueden encontrar en cualquiera de los zocos de las medinas de Túnez o de Marruecos, países que ya han descubierto todas las ventajas y sabores que aportan a la dieta mediterránea. ¿Te animas a probarlos todos?
Marruecos es uno de los destinos más atractivos del norte de África por su cercanía a Europa, su exotismo y el carácter abierto y hospitalario de sus habitantes. Se trata, en definitiva, del lugar ideal para quienes quieren sumergirse de lleno en una cultura fascinante y desconocida a la vez. Y para ello, Iberostar Hotels & Resorts pone en tus manos sus hoteles en Marruecos.
Pero, si quieres sumergirte en los paisajes, la historia, la luz y la calidez del Magreb, Túnez es una apuesta segura. Sus evocadores parajes desérticos, sus playas, sus zocos y mezquitas y la exótica gastronomía tunecina hacen de este país un destino idóneo para disfrutar de unas inolvidables vacaciones en familia, en pareja o con amigos. Y para que tu comodidad sea lo primero, nada mejor que disfrutar del confort de los hoteles en Túnez de Iberostar.
Zumaque (o sumac)
El fruto de este arbusto mediterráneo lo tiene todo: un color atractivo, unas variadísimas propiedades y un sabor muy versátil y auténtico. Lo ideal es añadirlo en polvo a adobos, carnes sazonadas o a los aderezos de las ensaladas ya que estas bayas tienen efectos antisépticos, entre otros beneficios.
Zataar
El zataar es la combinación perfecta de especias y hierbas árabes. Aunque su origen está en la Media Luna Fértil, es cada vez más sencillo encontrarlo en tiendas y zocos del Norte de África por ser el cóctel definitivo de aromas orientales. Suele contener unas cantidades similares de hisopo, zumaque, semillas de ajonjolí, sésamo, orégano, tomillo e hinojo. El resultado es tan sabroso que se aconseja usarlo solo como condimento de tostadas o panes ácimos, copando todo el protagonismo del plato.
Panes como el manakish
Precisamente el manakish, el pan de pita y otros panes levemente fermentados suelen ser la base de pizzas y tostadas a las que se les añade el zataar. Además, son uno de los mejores sustitutivos saludables de las hogazas y barras tradicionales ya que tienen un aporte calórico bastante inferior al de los panes occidentales.
Semillas de ajonjolí o sésamo
Su hipnótico sabor y su versatilidad las convierten en el añadido perfecto de cualquier ensalada, crema o, incluso, de cualquier rebozado. Además de aportar unos matices diferenciadores, este superalimento está indicado para reducir el colesterol, lo que lo convierte en un 2x1 de sabor y salud insuperable.
Cúrcuma
Su sabor lo ha convertido en añadido perfecto a legumbres, arroces y batidos por su aporte de color y por su toquecito amargo tan distintivo. Pero, además, la cúrcuma es ideal para proteger el estómago, prolongar la vida del hígado y fortalecer los huesos.
Azafrán
Puede que en las cocinas mediterráneas no resulte tan extraño utilizar el sabroso estigma de esta planta. Sin embargo, su uso en la paella y en los calderos es solo la punta del iceberg de todos los usos del oro rojo. De hecho, en el mundo árabe su utilización estrella es en infusiones y comienza a ser muy común encontrarlo como aderezo en todo tipo de cafés. Más allá del corriente uso en arroces, los lácteos son el mejor amigo de este producto ya que es capaz de sublimar cualquier postre como el arroz con leche o la tarta de queso. Asimismo, se trata de un ingrediente que mejora la memoria y facilita la pérdida de peso, además de tener un efecto vigorizante.
Harissa
Esta pasta realizada con pimientos rojos ahumados (en su versión más común) es un producto sabroso que no puede faltar en cualquier buena mesa tunecina. Además, se trata de un aditivo natural que tiene todos los beneficios del picante como sus efectos antisépticos, anticoagulantes y antidepresivos.
Tahini
Esta salsa espesa hecha con semillas de sésamo (también conocido como ajonjolí) es mucho más que la guinda de todo buen humus. Cada vez es más común encontrarla como el aperitivo perfecto para dipear con pan de pita. Pero también es perfecto para empezar el día, ya que en muchos países árabes se usa su característico sabor para combinar con un jarabe dulce o con una confitura. El tahini es pura proteína vegetal, además de ser un aporte considerable de vitamina B y de ácidos grasos como el omega 6 y el omega 9.
Baba Ganush
Este humus hecho con berenjenas es mucho más que una alternativa gourmet a la pasta de garbanzos. La sustitución de la legumbre por este vegetal le aporta a este aperitivo (o plato principal) un alto contenido de potasio, magnesio, fibra y calcio.