Fecha de publicación 01/06/2017
Descubre los mejores rincones de Tenerife practicando Paddle surf
El deporte de moda. Una forma perfecta para conocer la costa de Tenerife
Nos vamos a la isla del eterno sol en busca de largos paseos por la costa. Estamos con ganas de descansar y hacer deporte. Esta vez no buscaremos olas perfectas, y eso que en Tenerife abundan de norte a sur todo el año. Queremos unas relajadas rutas sin riesgos por sus delicadas costas a bordo de una tabla de paddle surf.
Ansiamos libertad y que el viento peine nuestras pestañas mientras solo el ruido del mar nos acompaña. Estamos en una muy buena época para iniciarnos en el paddle surf, y qué mejor sitio que la isla de Tenerife.
En el puerto homónimo, cada vez más concurrido, existen compañías que te hacen de guía para mayor seguridad. Las vistas de mar a tierra son únicas en el mundo y las playas de difícil acceso, un reto. Sin duda alguna el paseo más espectacular para adentrarte en la isla en paddle surf.
Estos bellos acantilados se orientan al oeste de la isla, resguardándose de los vientos alisios con sus más de 400 metros de altura. Una de las compañías más recomendables que organizan estas excursiones es Teno Activo. Ubicados en la turística localidad de Los Gigantes, no solo conocen los mejores itinerarios y secretos, sino que también ofrecen otras aventuras como el descenso en kayak por el barranco de Masca, una grieta que desemboca bajo los impresionantes acantilados.
De las Teresitas hasta Igueste de San Andrés
Si lo que quieres es un largo recorrido, la mejor opción es salir de la playa de las Teresitas hasta El Roquete en Igueste de San Andrés. Son algo menos de 10 kilómetros llenos de paz y armonía. Una ruta que tiene un doble filo ya que, por un lado, puede seducir a los inexpertos, pero siempre se tiene que tener en cuenta que su longitud es una distancia considerable y que, al menos, hay que estar en forma y ser deportista habitual para no agotarse.
Por el camino se va divisando, poco a poco, el salvaje macizo de Anaga, una península verde que aún conserva algo de virginidad. Y de repente, entre palada y palada, aparecen espectaculares monumentos como el Semáforo de Anaga –una antigua estación de señalización marítima- o el pueblecito de Igueste de San Andrés, el final del trayecto. Situado en una especie de barranco, este enclave es hoy uno de los destinos preferidos para los amantes del surf en toda la isla gracias a su ola de izquierdas. Además, al finalizar el recorrido por mar, ofrece algunas rutas de senderismo por si aún te sobran fuerzas.
La Meca del Palm Mar
Nos vamos de ruta camino a Arona para deslizarnos por Palm-Mar. Esta zona turística se ubica bajo la montaña de Los Mogotes y es colindante con la Reserva Natural Especial del Malpaís de la Rasca. Todo un lugar de ensueño para hacer una ruta cómoda muy cerca de las bajas de roca volcánica.
Para comenzar una experiencia completísima, el lugar de encuentro es sin duda la tienda Wawa Shop de Jonathan González, actual campeón de Europa de surf WSL. Se encuentra en la avenida Santiago Puig 1 en la zona comercial de Paraíso Royal de Arona, en plena zona de ambiente de surf y bares. Aquí te encontrarás todo tipo de material de surf, moda y accesorios, hacen campeonatos de surf y podrán aconsejarte sobre todo lo referente. Una vez en la zona, podemos plantearnos una ruta saliendo desde Los Cristianos hacia Palm-Mar y dejando atrás todos esos edificios y ambiente estival hasta llegar al destino.
En torno al Médano
Se podría asegurar que esta playa, con la característica Montaña Roja al fondo, se ha erigido como una de las mejores coordenadas para el deporte acuático. Sí, puede que nos estemos metiendo en una playa muy concurrida, pero desde luego merece la pena. Una de las cosas positivas que tiene el Médano son sus infraestructuras para este deporte. El auge del surf y del kite surf en este enclave ha hecho que las tiendas, escuelas y empresas de aventura proliferen y ofrezcan también los materiales necesarios para animarse con esta disciplina deportiva.
Además de este gran equipamiento, el Médano regala a la vista imágenes fotogénicas de su montículo característico y diversas rutas para iniciarse. Y es que esta coqueta bahía es un pequeño invernadero para los que quieren buenos resultados pronto. Además, las diferentes empresas y escuelas que promocionan la zona suelen incluir en la excursión un pequeño ascenso, a pie, por la icónica montaña para ver el atardecer. Una experiencia insuperable.